Este domingo, por el encuentro de vuelta de la final del torneo Reducido de la Primera B, Defensores Unidos enfrentó a Villa San Carlos en el estadio de Gimnasia de La Plata. El encuentro finalizó sin tantos, y gracias al triunfo 2-1 obtenido en la ida, el CADU se quedó con el ascenso a la Primera Nacional por primera vez en su historia. Todo Zárate está de fiesta.
El primer tiempo fue muy parejo, friccionado en la mitad de la cancha, típico de un partido definitorio. El equipo que hizo las veces de local fue quien intentó tomar la iniciativa y tenía el mayor control de la pelota, pero le faltaba claridad en los últimos metros para poder romper el cero.
Lo más interesante lo generó Lucas Licht, quien tras una serie de rebotes sacó un remate que se fue desviado. Por su parte, Defensores Unidos se replegó, buscó con un juego más directo lastimar y encontrar a Martín Giménez y Javier Velázquez, pero no tuvo éxito en su objetivo de tratar de acercarse al arco defendido por Rodrigo Benítez.
En el complemento, la Villa salió con la intención de igualar la serie y tuvo el empate en un cabezazo del ingresado Rodrigo Cao que se fue por encima del travesaño. A partir de allí, el conjunto de Villa Fox se acomodó mejor y casi abre el marcador. Giménez enganchó ante su marca y sacó un zurdazo que obligó a Benítez a responder con una gran atajada. Si bien Villa San Carlos empujó, el CADU soportó los diferentes embates y se mostró muy firme en la defensa.
Todo Zárate está de fiesta, ya que Defensores Unidos logró ascender por primera vez su historia a la Primera Nacional y ahora intentará seguir escribiendo páginas de gloria en la segunda categoría del fútbol argentino. Además participará de la Copa Argentina del próximo año, donde se medirá ante Godoy Cruz, rival al que eliminó en la edición del 2018.
