El auge de las apuestas deportivas y el juego online en Argentina no es una percepción aislada ni un fenómeno limitado a las grandes ciudades. Las cifras más recientes muestran una expansión constante, sostenida y cada vez más integrada en la vida cotidiana de una parte importante de la población adulta.
Según las proyecciones para 2025, los ingresos del mercado argentino de apuestas online alcanzarán los 1.570 millones de dólares y mantendrán una tasa de crecimiento anual cercana al 7% hasta 2029. Se trata de la consolidación de una industria digital que ha sabido adaptarse a la demanda de inmediatez, personalización y disponibilidad constante. A día de hoy, la mayoría de apuestas deportivas se realizan desde el teléfono, en medio de un partido o mientras se comenta una jugada en un grupo de WhatsApp.
Las encuestas realizadas para la Asociación de Loterías Estatales Argentinas indican que el 78% de quienes apostaron alguna vez en el último año lo hicieron al menos una vez por mes. Ese universo representa alrededor del 10% de la población adulta del país. Dentro de ese grupo, el hábito es más frecuente de lo que podría suponerse: el 64% apuesta por lo menos una vez por semana, una señal de que el juego se ha naturalizado como una forma recurrente de entretenimiento.
Entre los hombres, el porcentaje asciende al 69% y tres de cada cuatro gasta más de 8.000 pesos mensuales. En el caso de las mujeres, un 59% apuesta semanalmente y cerca de la mitad supera ese mismo nivel de gasto. En total, las apuestas online representan el 43% de las preferencias entre los jugadores argentinos, sobre todo en el segmento de 18 a 49 años, que es predominante tanto en áreas urbanas como suburbanas.
En barrios donde el fútbol, el automovilismo o el básquet forman parte de la conversación diaria, las apuestas aparecen como una extensión lógica del vínculo emocional con el deporte. No es casual que muchos jóvenes estén familiarizados con las cuotas, las combinadas y los bonos de bienvenida con la misma naturalidad con la que antes se hablaba de figuritas o estadísticas de jugadores.
En cuanto a los montos, la mayoría de los usuarios declara un gasto semanal de entre 1.000 y 5.000 pesos. Es un rango que parece accesible y manejable, lo cual contribuye a que el hábito se mantenga sin la sensación inmediata de estar comprometiendo la economía personal. Esa percepción, sin embargo, puede derivar en dinámicas de uso más intensas cuando el juego deja de estar asociado al entretenimiento y pasa a vincularse con la expectativa de recuperar pérdidas, aunque la tendencia actual no invita a pensar en ello.
Zárate, como muchas ciudades de la provincia, reúne varios factores que favorecen la expansión del juego online: fuerte identidad deportiva, alta penetración de smartphones y una comunidad joven que consume contenido digital en tiempo real. La cercanía con centros industriales y áreas portuarias también genera entornos donde los horarios rotativos y el tiempo libre intermitente se combinan con la posibilidad de apostar en cualquier momento del día.


