El Gobierno de Javier Milei está decidido a realizar cambios absolutos en materia electoral y, a pocos días de haber alcanzado la aprobación de la Boleta Única de Papel (BUP) en el Congreso, va por la eliminación de las PASO.
El Gobierno de Javier Milei está decidido a realizar cambios absolutos en materia electoral y, a pocos días de haber alcanzado la aprobación de la Boleta Única de Papel (BUP) en el Congreso, va por la eliminación de las PASO.
Para el funcionario nacional, “los problemas internos de los partidos los tienen que resolver los partidos, no el Estado nacional ni el conjunto de todos los ciudadanos”.
Vale recordar que el sistema electoral se instauró en 2009 y, para Francos, "no ha logrado cumplir con su propósito original de dirimir internas partidarias", por lo que planteó “diseñar un sistema porque las elecciones primarias no sirvieron para nada”.
En el mismo sentido se había expresado el vicejefe de Gabinete, Lisandro Catalán, hace algunas semanas, cuando adelantó que “el gobierno tiene la voluntad de hacer una reforma política integral con algunas cuestiones que también apuntan a la simplificación y modernización del sistema electoral y sobre todo a darle menos carga a la ciudadanía. Una de esas propuestas que está en estudio puede ser la eliminación de las PASO”.
Antes de sacar las PASO, el Gobierno logró la Boleta Única Papel
Esta semana, la Cámara de Diputados aprobó una reforma histórica en el sistema electoral: la implementación de la boleta única en papel (BUP) para cargos nacionales, que incluye la elección de presidente, vicepresidente y legisladores del Congreso Nacional, a partir de las próximas elecciones.
La medida fue sancionada con 143 votos a favor, 87 en contra y cinco abstenciones, contando con el respaldo del oficialismo, la UCR, Pro y la Coalición Cívica (CC).
El cambio central de esta reforma es la eliminación de las boletas partidarias, reemplazándolas por una única boleta que reúne toda la oferta electoral en una misma papeleta. Este nuevo sistema busca eliminar prácticas como el robo de boletas en el cuarto oscuro y los llamados "sellos de goma", partidos que se presentan solo para obtener financiamiento estatal destinado a la impresión de boletas.