Juan Caldaroni y Daniela Elias se fueron de Buenos Aires en 2009 por tres meses a practicar inglés a Nueva Zelanda y no volvieron nunca más. Con la idea de eliminar los prejuicios que rodean a las diferentes culturas, este año intentarán cruzar a dedo desde Filipinas hasta Turquía. “No buscamos atracciones turísticas. Buscamos atracciones humanas”, dicen los dos. En Marcando el polo llevan el diario de viajes.
Por Agustín Argento(Telam)
- ¿Cómo surgió la idea?
Juan: Trabajando en turismo, nos tentaba la idea de ir a un país angloparlante para mejorar el nivel de inglés. Barajamos varias posibilidades, pero finalmente encontramos en Nueva Zelanda el candidato ideal: nos daba la posibilidad de sacar una visa Working Holiday, con la cual podíamos trabajar legalmente en el país y, así, financiar nuestro viaje mientras recorríamos.
Daniela: El 1 de enero de 2009 (año nuevo, vida nueva) partimos junto a otra pareja amiga rumbo a Auckland. El regreso estaba programado para marzo de ese mismo año… pero todavía seguimos en la ruta.
- ¿Cuándo decidieron emprender el viaje sin regreso?
Daniela: Al poco tiempo de llegar supimos que el pasaje de vuelta no lo utilizaríamos. Más de un año trabajando y recorriendo Nueva Zelanda de punta a punta, con un viaje al sudeste asiático y al archipiélago de Samoa de por medio, generó que este estilo de vida se torne adictivo.
Juan: En el horizonte asomó Australia. La conveniencia geográfica, una visa Working Holiday por otros dos años y la imagen que todos tenemos de canguros saltando al costado de la ruta fueron demasiado tentadoras. Asia nos seguía tentando y fuimos para allí, donde estuvimos nueve meses uniendo extremos: desde las playas de Sri Lanka hasta el desierto de Gobi en Mongolia, pasando por las mezquitas de Irán y la selva de Borneo. Nos dimos cuenta que queremos vivir viajando, conociendo diferentes culturas y haciendo amigos en todo el planeta.
- En su blog mencionan los viajes de Marco Polo ¿Por qué esa referencia?
Daniela: Marco Polo viajó por Asia, exploró el continente, lo documentó y volvió a Europa para contar sus experiencias. Varios siglos más tarde, viajamos por las tierras que él mismo transitó y lo contamos a través de nuestro blog. Es un referente para el mundo de los viajes, y queríamos hacerle honor.
- ¿Cómo se financian?
Daniela: Tanto en Nueva Zelanda como en Australia hicimos trabajos temporales para poder ahorrar y así seguir viajando. Actualmente trabajamos como escritores de viaje de manera free lance. Publicamos para la web Guías-Escapadas, el diario El Cronista de Chascomús y la Revista El Viajero de Colombia, entre otras. Algunos de nuestros artículos son: Travellersbook: Comprendiendo al budismo; El Cronista - Ángeles, la ciudad del pecado; Guías – Escapadas: Escapada a Beijing, Escapadaa Buenos Aires y Escapada a Bangkok, entre otras.
- ¿Cómo siguen los viajes?
Daniela: En enero del 2013 comenzamos con “Eliminando Fronteras”, un proyecto que nace de la necesidad que sentimos de conocer y mostrar la otra cara de la moneda. No se trata de un viaje de vacaciones y ocio, sino de un largo camino que se irá desentramando al andar, que no busca destacar atracciones turísticas sino atracciones humanas. La idea es eliminar esas fronteras que fueron impuestas muchas veces al azar y dejar de lado los preconceptos que, por repetición, se nos hicieron ley y nos llevaron a prejuzgar pueblos enteros sin siquiera darles oportunidad a réplica. Pero, sobre todo, para eliminar la frontera más peligrosa: la que nosotros mismos creamos. Con la carpa, viajaremos a dedo la mayor cantidad de kilómetros que podamos.
Juan: Si hay algo que tenemos claro es que el Proyecto comienza en Filipinas y termina en Turquía. Visitaremos Filipinas, Indonesia, Malasia, Vietnam, Laos, Camboya, China, Japón, Taiwán, Corea del Sur, Tayikistán, Uzbekistán, Kyrgyzstán, Iraq, Irán. Esos son algunos países donde planeamos llegar con el proyecto.
- ¿Iraq? ¿Qué referencias tienen de ese país? En Argentina, lo único que se sabe es que hay atentados constantemente
Juan: Los países de Medio Oriente tienen muy mala reputación. Las únicas noticias que llegan al mundo occidental sobre esta región son de atentados, violación de los derechos humanos y guerras. Nunca se escucha sobre la hospitalidad de su gente, quienes en silencio deben lidiar con decisiones impuestas por los líderes. Nosotros vamos a visitar la Región Autónoma de Kurdistán, la cual todavía es perfectamente transitable y esperemos que lo siga siendo. Con esto queremos mostrar la otra cara de la moneda y eliminar los prejuicios sobre estos países.
- Si les preguntan por una anécdota, ¿cuál contarían?
Juan: En más de cuatro años fueron muchas. Una de las que quedó más marcada fue cuando estuve con un bicho detrás de mi oreja por tres días en Tailandia suponiendo que era una verruga, pero resultó ser un insecto que suele vivir sobre los búfalos.
- ¿Conocieron a otras personas que estén haciendo lo mismo? ¿Cómo se llevaron con ellos?
Juan: Como dijimos antes, el principio del viaje lo hicimos con una pareja amiga. Después de unos meses, cada uno siguió su rumbo. Virtualmente conocemos a varios viajeros que, como nosotros, eligieron el viaje como modo de vida. Personalmente, tuvimos el placer de conocer a Magalí y Ramiro en Italia, del blog Caminomundos, quienes viajan por el mundo cuidando casas ajenas.
- ¿Qué opinan sus familias sobre todo esto?
Daniela: Por supuesto que nos extrañan y les gustaría poder vernos más seguido, pero por otro lado están contentos que estamos viviendo el estilo de vida que nos gusta y que somos felices. Con Internet nos sentimos más cerca de ellos, aunque también nos gusta mandarles cartas escritas a mano para que puedan guardar como recuerdo.
- ¿Cómo surgió la idea de desarrollar el blog?
Juan: Viajando nos surgió la idea de contar todo lo que íbamos viendo, pero además teníamos muchas ganas de ayudar a los demás a que puedan animarse a emprender ese viaje tan esperado. Por eso es que hace ocho meses dimos a luz a Marcando el Polo, donde publicamos consejos sobre la WorkingHoliday, recomendaciones para viajar barato, experiencias en distintos países, anécdotas e inspiramos a otros a que se animen a cumplir sus sueños.
- ¿Hay algo que extrañen de Argentina? ¿Qué es lo que Argentina tiene que no tienen ninguno de esos países?
Juan: Extrañamos muchas cosas... la familia, los amigos, el fernet, el dulce de leche, el mate. Pero, después de más de cuatro años viajando, la necesidad urgente que antes sentíamos de retornar a esta cotideaneidad se transformó en la curiosidad de descubrir algo nuevo todos los días. Nacimos y crecimos en Argentina, y nuestras raíces estarán siempre ahí. El afecto que encontramos cuando volvemos a casa es algo que no vamos a encontrar en ninguna parte del mundo.
- ¿Qué aprendieron en todo este tiempo viajando?
Juan: Después de más de cuatro años explorando Asia y Oceanía, si miramos para atrás al día que dejamos Argentina, nos damos cuenta de que el proceso de aprendizaje constante que es la vida se intensifica viajando. Hemos aprendido que los pueblos con peor reputación pueden ser los que mejor nos reciban; que saliendo de las rutas de turismo masivo, la hospitalidad se magnifica; y que las guías de viaje no son tan imprescindibles como nos lo hacen creer.
Daniela: Entre tantas otras cosas, también desarrollamos habilidades indispensables como comer arroz con palitos, esquivar canguros en las rutas australianas, soportar el olor a pescado seco en Filipinas, viajar con diarrea constante en India y tolerar el peso de la fama en Bangladesh. Pero sobre todo aprendimos que las cosas cuando se quieren de verdad, se pueden lograr.
