La denuncia de una vecina: discriminación en un transporte público

Carlos Riedel22 abril, 2015

Una vecina de Zárate, se acercó a la redacción de Enlace Crítico para realizar una denuncia sobre una situación que, según sus dichos, no es la primera vez que ocurre en un transporte público.

Colectivo 228

"En el mediodía de este martes pasado, abordamos con un familiar una unidad de la empresa Motsa 228, que hacía el recorrido Ariel del Plata hasta Zárate", comienza a relatar.

"El tema es siempre el mismo, la frecuencias son cada vez más prolongados y por lo tanto se llenan enseguida, al punto que los pasajeros no tenemos ni hasta de donde sostenernos", continúa y agrega que ahí comenzó el calvario, "cuando ascendimos empezó a agredir a mi tía, tanto de palabra, insultándola, diciéndole barbaridades de su físico y después trató de empujarla", puntualiza. Llegó a decirle, asegura, que si no se bajaba no continuaba el viaje.

"La humilló adelante de todo el mundo, si que nadie dijera nada,  aunque como no nos bajamos tuvo que seguir".

Sin embargo, dice la vecina, el trayecto fue un infierno dado que persistieron los insultos, ahora de parte de algunos pasajeros y tuvieron que decidir bajarse en la ruta y esperar otro servicio.

"Mi tía llegó muy angustiada y nerviosa a casa y por si fuera poco cuando fuimos a presentar la queja en la empresa, nadie se hizo cargo, no pudimos averiguar el nombre del chofer y solo nos dieron un libro para hacer la denuncia", dice con impotencia.

"Estas cosas ocurren todos los días, somos rehenes de una empresa que encima brinda un mal servicio y tiene empleados que deberían dedicarse a otra cosa, menos a tratar con el público", reflexiona.

"Mi tía fue claramente discriminada y humillada por su condición y es un servicio público que mantenemos todos, pero se ve que a la firma no le interesa, somos un par de pasajeros más", cierra con tristeza.

(Fotografía ilustrativa)