Día del Canillita

Carlos Riedel7 noviembre, 2018

Los vendedores callejeros de diarios y revistas celebran hoy el Día del Canillita en homenaje a un dramaturgo y periodista uruguayo que creó la denominación. La idea nació un día como hoy pero de 1974, tras la muerte de Florencio Sánchez, autor del libro que tiene como protagonista a un chico apodado “Canillita” que vendía diarios para ayudar a sus padres.

En la obra literaria, Sánchez refleja la historia del protagonista, un niño humilde que usaba unos pantalones que tenía desde chico. Con el paso de los años, le fueron quedando cortos y dejaba ver sus “canillitas” mientras “voceaba” los periódicos.

La asociación del término nace en el lunfardo de “Canillita” proviene de la denominación latín de caña. En la jerga rioplatense, fue acuñada para referenciar a la tibia, el extenso hueso que conecta las articulaciones del tobillo y la rodilla, esa parte de las piernas que quedaban expuestas en los vendedores de diarios. Del mismo modo que las canilleras se convirtieron en los instrumentos deportivos de protección de la tibia (la canilla), los “canillitas” asimilaron la nomenclatura popular del oficio.

Canillita se convirtió en un éxito rotundo. Llegó al teatro porteño por encargo del actor y empresario Gerónimo Podestá. La popular actriz de la época Blanca Podestá haría del travieso niño que promocionaba en las esquinas la venta de periódicos. La repercusión fue inmediata y las críticas, elogiosas.

Tal fue el suceso que entre los artistas y los vendedores de diarios organizaron una función gratuita y exclusiva para los canillitas. Aquella función fue la coronación del sentimiento popular. Canillita había representado con solvencia y frescura la naturaleza del oficio. El término se perpetuó. El 7 de noviembre de 1947, a 45 años de la primera referencia del canillita con los diarios, se decretó el Día del Canillita en honor al fallecimiento de Sánchez, el hombre que concibió la definición.