De frente al domingo 27: mucha confrontación, pocas propuestas

Carlos Riedel19 octubre, 2019

El segundo tramo de la campaña electoral muestra violentos cruces discursivos y una escasa oferta para  los votantes. La opinión de los expertos sobre las estrategias de los dos principales espacios.

La contundente victoria del Frente de Todos en las Primarias, Abiertas, Simultá-neas y Obligatorias (PASO) del 11 de agosto modificó el panorama electoral. El correlato inmediato a este hecho fue el sustancial cambio de estrategia de los principales espacios de cara a los comicios del 27 de octubre.

Ante el escenario de crisis, Juntos por el Cambio, pero especialmente el PRO, la pata de la coalición gobernante a cargo del diseño estratégico, debió reconfigurar ipso facto su campaña. Pese al resultado a favor, Alberto Fernández cambió su postura de mesura discursiva poselección y aprovechó el debate presidencial para criticar con dureza a Mauricio Macri.

En virtud de ello, La Tecla consultó a renombrados especialistas en materia de comunicación política, quienes ofrecieron su mirada sobre las particularidades que se observan en este tramo del proceso eleccionario. La escalada en la confrontación discursiva, la falta de propuestas hacia el electorado y el viraje en las estrategias fueron los principales puntos a desentrañar.

Mario Riorda, director de la Maestría en Comunicación Política en la Universidad Austral, charló con este medio sobre el escenario electoral pos-PASO. “Es una campa-ña muy atípica, híbrida; porque tras la derrota en las primarias, el oficialismo se volvió mucho más activo, tratando de modificar el estilo de la campaña” puntualizó.

En ese sentido agregó que Juntos por el Cambio viró “de una campaña puramente digitalizada en las PASO a una que intenta movilización a la vieja usanza, lo que significa una propuesta modelo siglo XX”.

Para explicar, la moderación de Alberto Fernández tras su victoria en las PASO, los especialistas consultados recordaron el famoso teorema de Baglini. El mismo plantea que cuando un candidato más cerca se encuentra del poder, más modera su discurso político (o de campaña).

“Lo atípico se da porque es el candidato oficialista el que más arriesga y es el candidato opositor el más conservador, tratando de mantener la ventaja y no perder ningún tipo de voto de cara a esta elección y, si es posible, crecer, como aparentemente está sucediendo”, sostuvo Riorda, quien preside la Asociación Latinoamericana de Investigadores en Campañas Electorales (ALICE).

Luego de las elecciones del 11 de agosto afloró la virulencia en los cruces discursivos. Un ejemplo claro fue la andanada de críticas recibida por el candidato a gobernador de la Provincia, Axel Kicillof, luego de expresar que, según le había dicho un cura, “hay gente que se dedica a vender droga porque se quedó sin laburo”. Entre quienes respondieron con dureza al economista estuvieron María Eugenia Vidal, Miguel Pichetto y el propio Mauricio Macri.

“La campaña es puramente adversarial, por lo tanto, siempre la lógica de la reacción está presente. Sin embargo, me parece que contestando, necesariamente implica que esa reacción sea considerable, sea permanente y modifique el curso electoral”, plantearon desde ALICE.

Según datos del mismo organismo se estima que, aproximadamente, en promedio, el 20 por ciento de la publicidad política trabaja sobre propuestas y el resto sobre atributos, preferentemente personalistas, de las candidaturas. Asimismo se estima que entre el 80% y el 90% de la discursividad total es de tipo negativa.

“Las campañas son muchísimo más confrontativas que propositivas”, sintetizó Mario Riorda sobre el nuevo estilo de contienda electoral.

Julio Burdman

“Hay una repolitización, una apuesta al discurso más duro”

El politólogo Julio Burdman dialogó con La Tecla sobre el escenario electoral y dijo que luego de las PASO “hay una campaña en diferentes velocidades, porque la oposición considera que ya ganó”.

El fundador de la consultora Observatorio Electoral agregó que “Alberto Fernández está actuando como una suerte de Presidente electo sin exponerse demasiado porque su estrategia dominante es no ser demasiado incisivo en la competencia; lo cual tiene mucho sentido, porque los números fueron muy contundentes”.

Asimismo opinó que “Juntos por el Cambio está en un estado de desesperación. Están ensayando diferentes actos ofensivos, como las propuestas que larga el Presidente en forma diaria, algunas cumplibles y otras no tanto”. Y añadió que “se está recrudeciendo el ataque al kirchnerismo, sobre todo, a partir de algunos voceros”, entre los que destacó a Miguel Angel Pichetto.

El consultor observó un viraje en la estrategia de campaña: “En el caso de Juntos por el Cambio ha sido evidente”. Y agregó que desde antes de las PASO “hay una suerte de repolitización, una apuesta a los discursos más duros, una apuesta a la movilización de bases, a la confrontación, a idealizar un poco más, con una suerte de corrimiento a la derecha”.

Ante la falta de propuestas, Burdman dijo: “En el marco de una campaña más competitiva hubiéramos visto un mayor despliegue de propuestas. Acá tenemos un oficialismo tirando manotazos de ahogado y una oposición que se considera ganadora, que ya está tratando de tener la prudencia de la gobernabilidad”.

Carlos Germano

Tras las PASO “se revirtió toda la lógica de una campaña política”

El consultor Carlos Germano charló con La Tecla sobre los pormenores del escenario electoral. “Es una campaña totalmente atípica, porque ante la endeblez institucional de la Argentina tras el resultado tan contundente de las primarias, el candidato a Presidente que ganó, prácticamente fue electo Presidente el 11 de agosto”.

Agregó que con los números de aquel domingo “se revirtió automáticamente toda la lógica de una campaña política; en la cual, el actual Presidente empieza a realizar promesas electorales mucho más osadas y fuertes que el candidato opositor”. En sintonía con sus colegas, Germano planteó que después del 11-A, Fernández empezó a actuar como dicta la Teoría de Baglini, es decir, a cambiar su discurso hacia uno más moderado, más hacia el centro, no hacia los extremos, como está haciendo hoy el postulante de Juntos por el Cambio.

El director de Germano & Asociados hizo referencia también a la virulencia en el discurso electoral. “El ejemplo más claro es la embestida contra Axel Kicillof sobre el tema de pobreza y la droga. Lo sacaron totalmente de contexto y hubo un ataque generalizado no sólo de dirigentes de la provincia de Buenos Aires, sino también de los nacionales”, destacó el analista.

Por último vio muy positivo el viraje en la campaña encarada por Macri. “Me parece bien que haya roto un poco este esquema de lejanía y vaya a las provincias”, afirmó.