El poder de los ciudadanos en la unidad

Carlos Riedel22 julio, 2017

Por Ramón Vallejos...

En democracia, lo peor que nos puede pasar a los ciudadanos, es la ignorancia de creer que todos los políticos son iguales. Teoría desarrollada por los poderes económicos que dominaron durante 200 años nuestro país, para someternos brutalmente, a través de golpes de estado, o con gobiernos genuflexos entregados a "los dueños de la pelota", que hoy manejan el país con los CEOs, "que no son políticos", sino marionetas bien pagas por el poder real (econo-mediático), como partes del mismo negocio, a costillas del pueblo argentino.

Desfinanciando el Estado, la ANSES, las Obras Sociales: empobreciendo a los trabajadores, jubilados, pequeños comerciantes, PyMES, cuentapropistas, entregando la soberanía nacional, endeudando sideralmente a La Argentina con el extranjero por 100 años, etc.

Lo único que puede amortiguar, en parte, el golpe mortal que le están dando al país y a todos los ciudadanos, es saber votar legisladores de demostrada aptitud y actitud en defensa de los derechos conquistados, del trabajo y la inclusión, capaces y con agallas para enfrentar ese poder maligno, que domina las mentes por medio de los factores publicitarios desplegados en diarios, revistas, televisión, que relativizan la pobreza, la desocupación, el hambre, el costo de las tarifas y los alimentos básicos, que se agigantan día a día desde el 10 de diciembre de 2015, vaciando los bolsillos y llenando las arcas de los poderosos, mientras dicen: "la culpa la tuvo el otro", y manipulan, operan, castigan, apalean, reprimen a los pobres, a los hambrientos, desocupados, mujeres, niños y viejos.

"Sepan  votar los ciudadanos, con la cabeza bien despierta a los que les brindan bienestar y no a sus verdugos, como si estuvieran afectados por el Síndrome de Estocolmo".