8M Día Internacional de las Mujeres. Terminar con la brecha de datos, clave para avanzar hacia la igualdad de género

Carlos Riedel8 marzo, 2019

http://FUSA AC info@grupofusa.org.... Desde hace mucho tiempo se viene hablando de la brecha salarial, laboral y de oportunidades –entre otras- que separa a hombres y mujeres en todo el mundo. Ahoradiferentes investigaciones -y fundaciones como la de Melinda y Bill Gates- están poniendo el foco en la brecha de datos: es decir, la falta de información en algunos casos y en otros de información confiable, actualizada y de calidad sobre temas que afectan a las mujeres.

¿Qué temas?

Desde cuestiones relacionadas con la salud, la violencia, las expectativas de vida, el riesgo a morir en accidentes hasta otras más inofensivas como qué tan cómodo es usar la tecnología o la temperatura del aire acondicionado en las oficinas, por ejemplo.

Por estos días se está publicando el libro “Mujeres invisibles", de la británica Caroline Criado Perez, que ofrece evidencia de cómo el mundo se diseñó a partir de datos que solo tuvieron en cuenta a los hombres y sus características físicas y biológicas. Sin considerar cómo esto impacta en la salud, la vida cotidiana e incluso el riesgo de morir de las mujeres en todo el mundo.

"El impacto puede ser relativamente menor pero también puede haber riesgo de vida. Con esto me refiero a cosas como chocar en un automóvil que no responde a las medidas de una mujer o morir por una puñalada porque el chaleco protector policial no se ajusta correctamente al cuerpo. Para estas mujeres, las consecuencias de vivir en un mundo construido a partir de datos masculinos puede ser mortal", aseguró la autora, que investigó por tres años el tema.

Algunos datos con los que se encontró:

Una mujer tiene 47% más de posibilidades de sufrir heridas graves y 17% más de morir que un hombre en un accidente de auto. ¿La razón? Los autos fueron diseñados para adaptarse a las proporciones del cuerpo de un hombre. Ante un impacto, las mujeres son más vulnerables.

Incluso el maniquí para simular accidentes es más alto y pesado que una mujer promedio y tiene proporciones de masa muscular y una columna vertebral masculina.

Otro ejemplo son los ataques al corazón. Los síntomas más difundidos rara vez se dan en mujeres. Mientras que los varones sienten dolores en el pecho, las mujeres sufren dolores en el estómago, náuseas y disnea, pero eso casi no se comunica a la población. Esto hace que las mujeres tengan un riesgo 60% mayor de recibir un diagnóstico equivocado.

El Viagra es otro caso. En 1990 se demostró que podía eliminar el dolor causado por la menstruación durante cuatro horas. Pero ese uso no fue considerado prioridad de salud pública y los estudios se orientaron a la dirección que se conoce: la disfunción eréctil.

Otra: la fórmula para definir la temperatura promedio en la oficina se desarrolló en 1960 a partir de la tasa metabólica de descanso del hombre. Pero un estudio posterior halló que esa tasa es más baja en mujeres jóvenes lo cual significa que las oficinas de hoy son un promedio de 5 grados demasiado frías para las mujeres.

Todos ejemplos que demuestran cómo el mundo hecho a la medida de los hombres muchas veces es un riesgo para las mujeres, nada más ni nada menos que el 50 por ciento de la población.

Hoy, 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, es una buena oportunidad para visibilizar también esta brecha que perjudica a las mujeres en todo el mundo y un hecho incontrastable: hasta que no la dejemos atrás no podremos avanzar hacia una verdadera igualdad entre hombres y mujeres.