Sin dudas, las rivalidades históricas que el fútbol le dio a Campana y a Zárate hacen que el color violeta predomine en distintos rincones de la ciudad campanense y por el contrario, no abunde en territorio zarateño.
Sin embargo, y tal vez como una especial coincidencia, la Av. Lavalle, principal acceso a Zárate, se vistió del color violeta que identifica a la pasión pasión campanense. Un simpático detalle en el marco de los 60 años de vida que el sábado celebra Villa Dálmine.
Los grandes responsables de tamaña decoración son los jacarandá, que lucen desde hace décadas al costado de la avenida. Estos florecen dos veces al año, y esta vez, en coincidencia con los festejos por el aniversario del Viola.
¿Homenaje, casualidad o Karma?. Lo cierto es que muchos de los vecinos que a diario van y vienen entre las dos localidades, se les escapó una sonrisa ante la postal violeta en momentos donde el fútbol también le sonríe al Viola, que disfruta de la punta de la B Nacional.
Otro motivo más para celebrar.